Aunque muchas de las tecnologías inherentes a la denominada Industria 4.0 se asocian sobre todo con la optimización de procesos dentro de las plantas, la realidad es que existen múltiples casos en los que estas tecnologías han servido para optimizar toda la cadena de suministro, incluidas las operaciones ejecutadas dentro y fuera de las fábricas.

La implementación de tecnología y nuevos procesos se traducen en mayor orden y ahorro para las compañías.

Desarrollos como Big Data, robótica, Internet Industrial de las Cosas (IIoT), Cloud Computing, servicios de geolocalización, blockchain y vehículos autónomos, son cada vez más utilizadas para la optimización de las cadenas de suministro de diversas empresas que operan bajo modelos de negocio B2B y B2C.

MAR DE DATOS
Por ejemplo, el Big Data les ha permitido a las empresas tener un mejor registro, almacenamiento y análisis de datos asociados a sus operaciones logísticas, lo que ha derivado en la mejora de esquemas para la toma de decisiones, la reducción de demoras y riesgos, así como la captura de datos valiosos sobre proveedores, clientes y productos.

Asimismo, en modelos de negocio B2C, el Big Data asociado a otras tecnologías como Machine Learning (ML) ha permitido que las empresas puedan ordenar más eficientemente sus puntos de venta (PDV) e incluso les ha permitido adelantarse a las tendencias de sus mercados.

“Hoy tenemos tableros digitales, en donde nuestros clientes pueden ver en tiempo real qué órdenes estamos surtiendo o qué órdenes ya se embarcaron (…). Esa parte ya la tenemos desarrollada, pero esa es la parte histórica”, señala José Antonio García, director de Desarrollo de Nuevos Negocios de Onest Logistics.

Por su parte, la consultora Deloitte advierte en su reporte ‘Logística de última milla’ que “el Big Data (almacenamiento y gestión masiva de información) es un avance tecnológico cuyo objetivo es la eficiente gestión de información para transformarla en datos concretos y útiles para tomar decisiones acertadas. En concreto, el efecto del Big Data en las empresas logísticas puede ayudar a reducir los costes hasta un 50%”.

LA OPTIMIZACIÓN DEL DESPLAZAMIENTO DE MERCANCÍAS Y ELIMINACIÓN DE ERRORES, SON PRODUCTO DE LA IMPLEMENTACIÓN DE ROBOTS Y COBOTS”

ROBÓTICA
La logística interna, conocida como intralogística, se ha caracterizado históricamente por sus operaciones repetitivas. Es justo este rasgo el que ha posibilitado la inclusión de tecnologías para la automatización de procesos, como los robots y los cobots (robots colaborativos).

La reducción de accidentes, la optimización del desplazamiento de mercancías y la eliminación de errores humanos, son algunos de los beneficios derivados de la implementación de robots y cobots en las operaciones intralogísticas de las empresas.

Asimismo, el uso de almacenes robotizados también tiene el potencial de “eliminar la necesidad de incorporar pasillos para el paso de los operarios, por lo que aumentará el espacio disponible para el almacenamiento hasta un 50%. Además, la sustitución del personal por los robots en el almacén supondrá un ahorro en costes de aproximadamente el 20%”, señala Deloitte en su reporte de futuras tecnologías para la logística.

IIOT
La sincronización entre máquinas, herramientas y vehículos ha facilitado la administración y supervisión humana en tiempo real de la ubicación y, algunas veces, del estado de la mercancía en tránsito.

GEO-BLOCKCHAIN
El uso de geolocalización y blockchain aplicado a la trazabilidad ha facilitado el seguimiento del trayecto, localización y estado de la mercancía.

“A partir de estas tecnologías, los repartidores podrán ofrecer a los consumidores realizar cambios con respecto al punto de entrega y a su vez podrán optimizar su ruta y reducir costos de entrega, así como garantizar la trazabilidad y procedencia de los paquetes. En la actualidad, más del 90% de las empresas de paquetería de corta distancia no posee esta tecnología”, advierte Deloitte. Actualmente, empresas como CH Logística ofrecen ya soluciones de rastreo y tracking en operaciones logísticas dentro de México, Estados Unidos y Canadá.

NEO MOVILIDAD
Finalmente, los vehículos autónomos; que aunque continúan siendo una tecnología poco usada dentro del sector logístico, se calcula que para el año 2024 comenzarán a ser de mayor utilidad, de acuerdo con proyecciones hechas por Deloitte.

“La capacidad de un vehículo de autotransportarse de forma inteligente a su destino final puede ahorrar gastos de personal, hacer el envío a la hora que convenga al cliente y evitar errores en la ruta. En la actualidad, ya existen prototipos de empresas que incorporan altos niveles de conducción autónoma del vehículo”, acota la consultora.

“Lo que estamos viendo hacia el futuro es que queremos pasar de ser una compañía de logística tradicional a ser una compañía data-driven”, menciona José Antonio García, dejando ver el interés de Onest Logistics por convertirse en una firma cuya toma de decisiones estratégicas estén motivadas por el análisis de datos e interpretación.

Tarsus México se complace en darles la bienvenida a la vigésimo sexta edición de Expo Manufactura, el primer evento diseñado para el sector manufacturero mexicano, que año tras año ha cumplido a carta cabal con la misión de vincular a las empresas con lo último en tecnología para el beneficio de sus operaciones.

Expo Manufactura forma parte de un grupo de eventos a nivel mundial que no se suspendieron debido a los efectos de la pandemia.

Afortunadamente, en 2020 se pudo llevar a cabo antes de que fuera declarada la emergencia sanitaria y el año pasado también se efectuó como el primer evento en Monterrey con la presencia de visitantes y expositores.

Todo ello se pudo lograr gracias al programa Tarsus Trust, el cual se basó en las directrices operativas producidas por los organismos de la industria, incluidos Seguridad Industrial y la Salud Ocupacional (SISO), Asociación Internacional de Exposiciones y Eventos (IAEE), Asociación Mundial de la Industria de Exposiciones (UFI) y Operador Económico Autorizado (AEO).

En todo momento, la salud y la seguridad de todos nuestros participantes siempre serán la máxima prioridad y guiarán cada decisión que tomemos en cuanto a la programación de actividades para cumplir con todas las medidas sanitarias exigidas por las autoridades internacionales como por la autoridad local.

Cabe mencionar que México es el país más avanzado en Latinoamérica en cuanto a eventos realizados en medio de la pandemia al sumar más de 80.

En este sentido, Expo Manufactura es una herramienta de networking comercial que tiene 25 años acercando a la oferta y la demanda.

Entonces, es fundamental poder hacerles un foro a las empresas que están trayendo a los mejores exponentes de tecnologías de bienes de capital, de materias primas y de sistemas de asistencia a la manufactura.

Además, este evento cumple una función muy importante, porque va a acercar a las empresas que desean de alguna manera atraer las manufacturas hacia un reshoring a la región económica y que se garanticen estos flujos de soluciones para sus diferentes productos.

Entre las características que hacen a Expo Manufactura un evento único en su tipo, figura la cantidad de organizaciones y gremios que participan ya sea aportando conocimiento o satisfactores específicos y bienes de capital que estén dirigidos a ciertos procesos industriales.

La mayoría de los expositores presentan sus soluciones ya preparadas para una manufactura de alta calidad y en ello radica que se reúna al 80 o 90% de la comunidad más influyente de la manufactura en México.

Durante todos estos años hemos logrado acompañar al desarrollo de la manufactura presentando lo último en tecnología de transformación generando una simbiosis con la industria mediante un evento proyectado para fortalecer la productividad de las empresas mexicanas.

Los esperamos en Monterrey, donde podrán conocer alternativas para mejorar su productividad y formar parte de la reactivación de la industria en México.

Hacia finales del siglo XVIII, el desesperado grito de millones de obreros que laboraban en las primeras fábricas surgidas a partir de la Revolución Industrial exigiendo la implementación de medidas que velaran por su seguridad en los centros de trabajo, trascendió.

Fue así como varios de los gobiernos europeos comenzaron a exigirle a los propietarios de las factorías que se enfocaran en garantizar la integridad de sus empleados durante las extensas jornadas laborales que diariamente se extendían hasta 16 o 20 horas, en las cuales los récords de accidentes constantemente se incrementaban.

Aquellas rígidas e incómodas botas de antaño comienzan a ser desplazadas por atractivos modelos deportivos con características dieléctricas y antiestáticas.

Con respecto a los obreros, también se les comenzó a solicitar que utilizaran botas, las cuales pese a su burdo e incómodo diseño evitaban que sufrieran golpes, quemaduras y hasta mutilaciones, esto debido a que —en ciertos casos— a la confección del calzado se le agregaba un casquillo de acero en la punta.

Si bien es cierto que los accidentes no dejaron de presentarse en los centros de trabajo, adquirir el hábito de portar lo que durante ese tiempo eran consideradas unas espantosas botas industriales, garantizaba —en la mayoría de los casos— terminar con el pie completo, pero los inadecuados materiales y el mal acabado del calzado no evitaban el surgimiento de dolorosas ampollas.

Con el correr de los años, varios fabricantes de calzado intentaron mejorar el terminado de sus modelos e incluso buscaron que no fueran tan agresivo con los pies. Sin embargo, bajo la premisa de velar por la seguridad, el confort era relegado a segundo plano y los avances prácticamente fueron nulos.

Ahora bien, la evolución y los distintos derroteros en nuevos sectores industriales, donde se requería de modelos de calzado con características antiderrapantes, dieléctricas y antiestáticas, en cierto sentido también detuvo la evolución estética del calzado industrial.

No fue sino hasta por ahí de los años 70 u 80 cuando comenzaron a surgir algunos esfuerzos por fabricar calzado dirigido a la industria, pero con formas, colores y materiales distintos, una estrategia que llevó a compañías como Caterpillar a ganar terreno entre los tradicionales fabricantes de botas industriales.

NUEVAS MARCAS “AL QUITE”
Con el objetivo de aprovechar su enorme conocimiento obtenido a lo largo de más de medio siglo de crear calzado deportivo de altos estándares de calidad enfocados en ergonomía, confort e incluso retorno de energía, trasnacionales como Reebok y Puma optaron por generar una línea de modelos dirigida a personas que diariamente laboran en distintos sectores de la industria, donde al permanecer de pie durante sus jornadas requieren de un zapato cómodo, pero sobre todo seguro.

Bajo este concepto, existen varios modelos con apariencia deportiva que garantizan suelas resistentes al resbalamiento, con un nivel superior de agarre en distintas superficies, pero que además tienen un casquillo hecho de elastómeros no ferrosos que los hace muy ligeros, sin la posibilidad de conducir calor, frío o electricidad, o bien con la facultad de disipar la estática del cuerpo del usuario, descargándola hacia la superficie terrestre para prevenir su acumulación.

TRASNACIONALES LIGADAS AL DEPORTE OPTARON POR GENERAR UNA LÍNEA DE MODELOS DIRIGIDA AL PERSONAL QUE LABORA EN DISTINTOS SECTORES DE LA INDUSTRIA, DONDE AL PERMANECER DE PIE DURANTE SUS JORNADAS REQUIERE DE UN ZAPATO CÓMODO, PERO SOBRE TODO SEGURO”

Aunque esta línea de producto no se fabrica en México, algunas empresas nacionales también dedicadas a elaborar calzado industrial fungen como sus distribuidoras en el mercado local, es el caso de Drypro.

Gracias a su tecnología, calidad, servicio e innovación, dicha compañía de origen mexicano es líder en la fabricación de botas impermeables, lo cual contribuyó a que la multinacional Reebok se fijara en ella para establecer un vínculo comercial.

Al respecto, Paulo Álvarez, director comercial de Drypro, advierte de la complejidad que implica elaborar calzado con características y materiales que lo hagan antiestático, dieléctrico, antiderrapante y ergonómico. “Mantener una constante calidad implica retos, tener buenas relaciones con proveeduría, un personal altamente capacitado y contar con maquinaria de última generación”, asegura.

Sobre la alianza establecida con la multinacional líder en la fabricación de calzado deportivo para distribuir su línea de calzado industrial reconoce que es un aliado comercial importante dentro de sus aspiraciones por consolidarse en el mercado.

“Como marca líder siempre estuvimos buscando diversificarnos en la industria, así que por nuestro alcance y reputación se nos otorgó la exclusividad de vender esta marca en México. Sin embargo, la línea industrial de Reebok ya tiene más de 20 años en Estados Unidos y Europa, solo que carecía de presencia en nuestro país. Así que simplemente se certificó bajo las Normas Mexicanas y el calzado cumple con el objetivo de brindar seguridad de alta gama”, afirma.

Lo cierto es que los fabricantes de calzado deportivo detectaron que existía un nicho de oportunidad para crear modelos dirigidos a personas que realizan ejercicio, pero que posteriormente dedican una gran parte de su tiempo a laborar en instalaciones donde requieren de un calzado cómodo y seguro.

“Al final de cuentas, la misma persona que durante la mañana realiza ejercicio con un calzado deportivo también tiene un trabajo y busca un rendimiento similar en su zona laboral, donde permanece más horas. Así que existe un mercado cautivo, el cual se desea aprovechar con el conocimiento de la marca para llevarlo a otro nicho”, menciona el directivo de Drypro.

Cabe señalar que el valor comercial del calzado industrial de la línea de Reebok y de otras marcas deportivas supera, y por mucho, al de los modelos convencionales que se fabrican en México, pero su precio está justificado por la seguridad y el confort que garantiza a las personas que lo usan.